Para los amantes de la historia de México en este lugar podrás recordar a algunos héroes de la Revolución Mexicana
Durante una jornada de trabajo tuve la oportunidad de cubrir una nota que hablaba sobre algunos muralistas de Los Mochis. Sorprendido por el talento que vi, decidí acudir a los lugares en donde sus pinturas han dejado huella y fue entonces que llegué a El Terreno.
Ubicado en la colonia Jiquilpan, en la calle Vicente Guerrero, se encuentra un lugar muy peculiar de Los Mochis, en el que el ambiente lo dice todo. En la entrada encontramos algunos juguetes de la época de los setentas, y es en donde los niños pueden hacer realidad su sueño de montar a caballo.
En el Terreno encontramos comida mexicana y un amplio menú de la gastronomía sinaloense que abraza el apetito de cualquiera que esté de visita; chilaquiles rojos, verdes y naranjas; pozole, barbacoa, chilorio, hígado encebollado; un café único que nos remonta a la época del grano recién tostado, en las manos de aquellas mujeres que sabían el secreto de la cocina de antaño.
Agua de horchata, jamaica o de avena, que por cierto es una delicia, son muestra de que el sazón marca la diferencia. En mi recorrido encontré una chef muy reconocida de Los Mochis y ya entrados en confianza me explicó que es muy agradable estar en un espacio para desayunar, en el que el ambiente del lugar te hace recordar que aún dentro de la ciudad podemos remontarnos al rancho.
En medio de la zona urbana existe un espacio en el que te olvidas de los autos y comienzas a adentrarte en el pasado de la Época de oro del Cine Mexicano, con algunos tintes en las paredes, de fotografías de Pedro Infante, María Félix, Jorge Negrete, Resortes, en fin todos aquellos grandes que nunca pasarán de moda.
Un horno de piedra listo para preparar un pan de mujer, un asador diseñado para celebrar con carne asada, una cocina que envuelve el toque del sazón sinaloense y abraza el paladar más riguroso.En un rincón del restaurante, tratando de jugar a las escondidas, encontramos a la mascota de El Terreno, una tortuga que aún no tiene nombre. Una tortuga que esconde la cabeza, pero es tratada como toda una reina con su deliciosa porción de lechuga diaria.
Haciendo un recorrido por el jardín llegamos a un paseo al que le llamo el caminito de piedra; como en la época antigua, también hay herramientas del siglo pasado: planchas para quitar las arrugas de la ropa, que eran fabricadas de puro acero y que tal vez llegaron a usar los revolucionarios mexicanos.
Los teléfonos de antaño, una que otra piel disecada, una chimenea lista para encenderse en el frío y sobre todo la oportunidad de platicar al aire libre sin estrés alguno. Lo que sí es recomendable es poner una alerta en el celular, porque en El Terreno el tiempo pasa volando y ni cuenta te das.
Sin duda alguna, si estás en Los Mochis tienes que visitar El Terreno.
