Ayudar a los animales es algo que Alex Fleming se ha tomado muy ensrrio, y es que creó un lugar para que los animales pasaran sus últimos días de vida, idea que surgió tras perder a su querida perra ‘Maggi’.
Fue en el 2016, cuando abrió las puertas del hospicio de animales en Escocia, y su único propósito es que los consentidos del hogar gocen de calidad de vida antes de dar su último respiro.
A través de su libro ‘No life too small’, Alex Fleming contó acerca del momento en que vio por primera vez a su mascota, considerando como amor a primera vista, y que es comprensible el profundo dolor que siente ante la pérdida de su entrañable compañera.
«Fue realmente una idea ridícula porque estaba con un afectamiento a mi salud, y había pasado por un sentimiento tan horrible por perder a ‘Maggi’, pero la idea estaba ahí, y siempre iba a molestarme hasta que hiciera algo al respecto», comentó.
La canina carecía de afecto, por lo tanto, su expresión facial era un reflejo de ello; estaba muy delgada, lo que indica que no la alimentaban bien, aunque dentro de los planes de Alex no estaba brindar cuidados a su mascota, la historia lo conmovió, así que no pudo hacer caso omiso a esta situación.
Alex se encargó de que la perra ‘Maggi’ fuera feliz mientras lidiaba con ese problema de salud que finalmente le quitó la vida.
El nombre del hospicio hace honor a quién fuera su amiga de Alex, ‘Maggi Fleming Animal Hospice’, un espacio que los animales se puedan sentir amados, protegidos y libres de tratos negativos por parte de aquellas personas que consideran que ya no sirven, debido a la vejez.
